El diseño gráfico y el diseño web se encuentran en una situación de evolución y cambio constante, tanto desde un punto de vista tecnológico como desde una perspectiva social.
Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación han experimentado un acelerado crecimiento durante las dos últimas décadas, al abrigo de la también rápida expansión de internet que no sólo ha penetrado en la mayoría de hogares del mundo desarrollado, si no también en los bolsillos de las personas pues en la actualidad la mayor parte de la población andamos permanentemente conectados a través de los smartphones y/o las tablets. Este cambio tecnológico constante ha propiciado la existencia de nuevos medios y nuevos soportes donde el diseño gráfico es capaz de desarrollar su creatividad.
Así, el diseño gráfico se encuentra sujeto, y alimentado, por estos cambios a nivel tecnológico, pero también por los cambios sociales en lo que a tendencias, modas y hábitos se refiere. Todo ello nos lleva a una conclusión: el diseño gráfico es una disciplina sujeta a un continuo cambio, es decir, una disciplina absolutamente innovadora y como tal, también la Escuela de Diseño se caracteriza tanto por la excelencia académica como por su innovación.
Estudiar Diseño Gráfico y Web en la Escuela de Diseño, ya sea un curso avanzado, ya sea un programa de posgrado o máster, supone conocer, aprender y comprender las últimas tendencias que imperan en esta materia, así como trabajar con las técnicas y herramientas más actuales e innovadoras.
La Escuela de Diseño se encuentra plenamente comprometida con la proyección profesional de todo su alumnado y por ello aporta los conocimientos y habilidades imprescindibles que favorecen la rápida y temprana inserción laboral de todo aquel que finaliza con éxito su programa de estudios y que por lo tanto, se abre un camino de futuro ya al auspicio de la categoría de Profesional del Diseño Gráfico.